Vida sana

El placer de compartir un mate

El placer de compartir un mate


Publicada el: 26-04-15



Llegó el otoño y es una estación ideal para tomar unos mates calentitos.
Para todos los que gustamos de esta hermosa costumbre, la llegada del otoño es especial. ¿Acaso hay algo más lindo que un mate calentito en esas mañanas frescas?
Si uno está solo el mate le hace compañía, y si lo estás compartiendo con alguien te dan ganas de conversar. Porque de eso se trata: el mate no diferencia clases sociales, lo toman todos. Tampoco diferencia edades, lo pueden tomar desde los más bajitos hasta las personas mayores. Seguramente si nos pusiéramos a pensar quién nos invitó nuestro primer mate nos lloverían hermosos recuerdos. Es por eso que cuando conocemos a alguien le decimos: «Nos juntemos a tomar unos mates». Amargos o dulces, a la mañana o después de comer, un mate no se le niega a nadie.
El mate alberga en tan pequeño recipiente la alegría de compartir, de celebrar, el poder de la reflexión.
Si pensamos en beneficios para la salud el mate tiene un gran poder antioxidante -es uno de los diez alimentos con más antioxidantes del mundo-, ayuda a controlar la hipertensión y es un energizante natural.
En nuestro país el mate está declarado bebida nacional y es la bebida más consumida.
La planta del mate (Ilex Paraguarensis) no crece en ningún otro lugar del mundo más que en Brasil, Argentina y una pequeña parte de Paraguay. En Siria, por ejemplo, consumen la misma cantidad o más que en Argentina pero no la pueden producir.
El proceso de elaboración de la Yerba Mate es muy artesanal. Si bien la planta es una sola, la Ilex Paraguarensis, el sabor de la yerba varía según el clima donde nace, crece y se desarrolla.
En Verdeflor tenemos cinco riquísimas variedades para todos los gustos: Hierbas Serranas, Melisa, Naranja, Menta y Boldo. ¿Ponemos el agua para unos matecitos?